¡Larga vida a los libros usados!

En esta ocasión no vengo a reseñar ningún libro, y mucho menos a hacer un book tag. Hoy quiero hablaros de algunas iniciativas que me han parecido realmente interesantes. 

Quiero hablar de los libros usados, y hacer énfasis en que usado no quiere decir viejo. Muchas veces los libros son abandonados cruelmente por sus propietarios en una sucia y fea caja escondida. En otras ocasiones, estamos necesitados de nuevas historias, pero no queremos o podemos pulir toda nuestra billetera en la librería.

Por eso os propongo alternativas reales que he visto y de las que puedo dar fe de que funcionan.

PROPUESTA #1 Vecino, ¿compartimos?

Mi edificio es una comunidad mediana, pero con una pequeña llama ecologista. Justo encima de los buzones, unos vecinos dejaron tres libros, en buen estado, que ya no querían. Durante varios días los observé con curiosidad. No es algo con lo que me encuentre a diario. 

Esa misma semana, me di cuenta de que uno de los libros había desaparecido y en su lugar estaba otro distinto. Ese pequeño cambio llamó mi atención. Día tras día, y semana tras semana vi que los libros se esfumaban y llegaban otros títulos.

Hablando con una vecina nos comentó que se trataba de un intercambio de libros. Me quedé impresionada de que mis vecinos, que en algunos casos pueden ser irritantes, hubiesen hecho una idea tan original. Vale, quizás no han descubierto una vacuna, ¡pero es una gran idea!

Dejas un libro que no quieres y coges otro nuevo con un mundo de fantasías por descubrir.

Así que esta iniciativa lleva mi sello de aprobación.

PROPUESTA  #2 ¡Todo a dos cientos!

Adoro ir a la biblioteca. Es un refugio lleno de estanterías repletas de libros y el olor a páginas inunda todo. Siempre está al día con nuevas e interesantes iniciativas y propuestas sobre libros. Hace una semana me fijé por primera vez en que había una mesa con cajas llenas de libros y un colorido cartel encima. Me han sorprendido con una venta de libros a precio de ganga. Todos los títulos que están a la venta se pueden adquirir por solo dos euros. Así es. ¡Libros por tan solo dos euros! Y lo mejor es que el dinero obtenido es para aumentar el fondo de la biblioteca y así poder poner nuevos libros a la disposición de los usuarios.

Seguramente no encontrareis ahí las grandes y actuales sagas, pero siempre hay alguna joya esperando a ser descubierta y leída.

Os animo a uniros a este tipo de iniciativas como estas. Sois ecológicos y tenéis la oportunidad de disfrutar de más historias. Todos ganamos. El planeta te lo agradecerá.